Todo lo que te quiero es todo lo que tú me has enseñado.

En cuatro meses aprendí lo que no hube aprendido en veinticinco años.
Ni en los lejanos días de escuela, ni en las mañanas frías llenas de apatía donde ni el sol salía para calentar mis pasos hacía el cruel destino que intentaban hallar mis pies, el mismo, que a la inversa, tardaban mucho más en encontrar. Malditos los amaneceres que despertaba sin dormir y que oscuras me llevaban hacia el cruel currelo.
Ni lo que los maestros intentaron pero enseñarme no pudieron. Dividida la vida en absurdas asignaturas donde no se encontraba un resquicio de lecciones de lo que he aprendido en cuatro meses contigo.
Ni lo que a base de palos me enseñaron mis mal llamadas antiguas compañeras. Desde la que no quiso darse cuenta siquiera del amor que le procesaba hasta la que con desprecio escupió en lo que un día con tanto empeño ella misma se empeñó en sembrar.
Ni la palabra, consuelo, consejo, de mi fiel amigo, mi único y fiel compañero, mi padre.
Ni lo que se santifica en cantinas, lo que se reza en estadios, se bebe en la calle y se vomita en los bares.
Ni con la palmadita en el hombro del compañero que osó llamarse amigo, ni el amigo que sólo se consideró compañero.
Ni uno, ni la otra cosa, me enseñó, ni por asomo, lo que es, lo que significa, el estar enamorado. El querer a alguien que no sólo se merece ser querida, que se merece mi costilla como se la ganó tu tocaya allá por los inicios de la antigua antigüedad.
Sólo tú has conseguido enseñarme, mostrarme, ejemplificarme, santificarme, hacerme beber... lo que es el amor.
Todo lo que te quiero es todo lo que tú me has enseñado.

Tu hombre... mi costilla.

Felicidad

(Del lat. felicĭtas, -ātis).

1. f. Estado del ánimo que se complace en la posesión de un bien.

2. f. Satisfacción, gusto, contento. Las felicidades del mundo

3. f. Suerte feliz. Viajar con felicidad

La razón...

... de mi ausencia.

Mis noches...

He vivido noches malas, he vivido una noche buena, he vivido veinticuatro noches viejas. He vivido el desengaño de una noche traicionera, he vivido su rechazo en la noche más amarga. He vivido el encanto de una noche de luna llena. Me ahorro el tiempo verbal, me ahorro la persona, y seguiré contando las noches que he vivido hasta las que merecieron la pena. Noches de música buena, noches de nefastos conciertos. Noche donde tuvieron lugar buenas y suculentas cenas. Noches en las que comí tristes y míseras calabazas. Noches de quiero y no puedo, que el alcohol no corría por mis venas, y las más donde el alcohol cerraba mis heridas. Quise vivir noches de amor locas y sólo conseguía una noche de locura desenfrenada, sin amor, sin tesituras relacionadas con algún sentimiento. Noches vacías de sentido, y noches llenas de fracasos. Como la noche donde espere a una y a otra… y sigo esperando. He vivido noches crueles de espanto, y noches donde curé de espanto mi cabeza con rimas de nacionalidad ostionera, paridas en la viñera Caleta. Sigo esperando, a las que dije antes, ¡qué pena de noche! He vivido noches de cama y he visto camas donde se hizo de noche, sin motivos para ello, y he vivido noches donde el alba no llegaba, unas por tedio y otras porque yo lo rogaba, a tu oído, entre tu pelo, con tus labios formando las palabras mientras rozaban los míos, porque esa noche aprendí a hablar desde el corazón. Por eso quiero repetir la noche que viví contigo, para no volver a malvivir esperando a que llegue una nueva noche que disfrutar en tu cama. Viví la noche en la que mi almohada renegó de ser lo que era y enloqueció por no cobijar tu melena, y he tenido la suerte de estar presente en la noche que recuperó la cordura. Y he vivido noches junto al mar, y la mar de noches no he vivido por no tenerte a mi vera.

No estoy ni pa' ti...

Razón:

Anda, si ya tenemos turrón en el frigo...

Vacaciones, inversiones, contratiempos, desiluciones... entre tantas cosas no recordaba que tenía un blog y si me acordé no tenía lucidez para hablaros de nada en concreto, asi que sólo paso a saludaros, a los que, desde fuera un dia me conocieron, gente de foros, amigos de redes, os dejo por aqui mis deseos equivalentes a los que anhelo para mi en un futuro próximo y que empiecen a manifestarse por estas fechas, tan buenas como otras cualquiera, pero mira, son las que más cercanas andan y más vale antes que lustros después.

Un saludo.

Citando.

Si alguien te dice caballo una vez, dale un puñetazo. Si te lo dice una segunda vez dile que es imbécil. Si te lo dice una tercera vez ve pensando en comprar una silla...